El mundo del Kinesiotape

¿Qué es el Kinesiotape?

Es una fina venda elástica hecha de algodón que tiene la particularidad de poder estirarse hasta 130-140% de su original longitud. Contiene una capa fina de pegamento de uso médico para poder adherirse a la piel y permitir que esta pueda transpirar.

El fin de que sea un material con la capacidad de estirar es por la tracción que ejerce en la zona afectada corrigiendo su función correcta en casos donde haya una amplitud de movimiento. El adhesivo permite que permanezca en la zona y ejerza su efecto sin moverse del lugar en donde se colocó, solo basta con frotar la cinta en contacto con la piel para activar así su pegamento. El adhesivo se activa a través del calor emitido por frotar la cinta sobre la piel.

Este tipo de vendaje tiene la ventaja que no limita la circulación sanguínea y mantiene la llegada de la información propioceptiva de la zona que tiene la lesión, lo que ayuda a una pronta recuperación del movimiento normal del área lesionada.

Tipos de corte:

  1. Corte en I: “Las técnicas en I suelen tener dos aplicaciones: en ligamentos y músculos”, relata Pérez. “En el caso del ligamento, buscamos sujeción o estabilidad mientras que en los músculos, depende de lo que queramos conseguir, podemos colocarla de la inserción al origen del músculo (efecto relajante) o al revés (efecto estimulante)”.
  2. Corte en Y: Pérez aclara que normalmente ésta es una técnica centrada en los músculos, “especialmente en aquellos que tengan varios vientres (parte carnosa donde se encuentran las fibras)”. También se emplea cuando se pretende que la aplicación no sea directa, de ahí que el fisio bordee con este corte los límites del músculo. Actúa de manera muy similar a la aplicación anterior, pudiendo lograr un efecto estimulante o relajante.
  3. Corte en ‘donuts’: “Las técnicas en ‘donuts’ son aquellas que van buscando aumentar el espacio en una articulación”, señala el fisioterapeuta. También se utiliza en “las aplicaciones en las que tienes que esquivar dedos para sujetarla. Por eso, le haces un hueco a la venda para introducir el dedo y ya pegas el resto de la tira en la zona que quieras ponerla”, alecciona Pérez.
  4. Corte en ‘pulpo’: Este tipo de colocación de tiras está centrada en la “reabsorción de edemas y para potenciar el efecto circulatorio”.

Técnicas:

Usa 6 técnicas correctivas aplicando distintas tensiones en función de lo que queramos conseguir.

  1. Corrección mecánica: utilizada para prevenir los movimientos patológicos sin limitar el movimiento natural.
  2. Corrección de la fascia: ayuda a dirigir el movimiento de una fascia muscular.
  3. Corrección del espacio: amplía el espacio intersticial, descomprimiendo los tejidos y aliviando el dolor.
  4. Tratamiento de ligamentos o tendones: ayuda en la estimulación de los mismos.
  5. Corrección funcional: utilizada para limitar la hiperextensión.
  6. Corrección circulatoria: ayuda a disminuir la presión en los tejidos aumentando el flujo sanguíneo.

Efectos y beneficios:

Existen innumerables beneficios que pueden obtenerse teóricamente con el uso de este tipo de vendaje elástico.

  1. El vendaje elástico puede corregir la alineación de músculos débiles facilitando el movimiento.
  2. Por su firmeza al adherirse a la piel produce un alivio de la presión que puede ejercer una inflamación o lesión sobre los nociceptores que son los que detectan la presencia de la lesión.
  3. Produce una estimulación de los mecanoreceptores que mejora significativamente la propiocepción y produce una gran mejora a nivel articular y muscular.

Para hablar del efecto circulatorio y del efecto analgésico del kionesiotape, hay que entender que en las lesiones musculares se produce un estrechamiento del espacio que hay entre la piel y el músculo. Esa reducción de espacio provoca que los receptores dolorosos se estimulen al tiempo que disminuye la presión sanguínea. Con las tiras se consigue un levantamiento microscópico de la piel, que restablece ese espacio y el aporte sanguíneo (efecto circulatorio/drenaje), lo que a su vez provoca que esos receptores del dolor dejen de estar estimulados (efecto analgésico).

Sobre el efecto neuromecánico, el kinesiotape centra su acción en la piel, en su capacidad de enviar información al cerebro y en la capacidad que el cerebro tiene de proporcionar respuestas mediante los receptores del sistema somatosensorial (parte del sistema nervioso que nos da información sobre el dolor, tacto, movimiento, picor, textura…). Todos los movimientos corporales son llevados a cabo como respuesta a estímulos exteriores. Así, podemos influir en cualquier movimiento mediante la colocación de las tiras además de alterar el tono muscular según el modo en el que se posicionen.

Por ello, puede tener un pequeño papel beneficioso en mejorar ciertos aspectos como la fuerza o el rango de movimiento en ciertas lesiones. También podría tener una posible acción preventiva, aunque no está del todo claro. El kinsiotape incrementa el flujo sanguíneo y se ha demostrado que genera una reducción del dolor, aunque en este caso siendo combinado con masajes manuales.

Contraindicaciones o situaciones de precaución:

El kinesiotape no es aconsejable en:

  1. Heridas abiertas.
  2. Pieles irritadas.
  3. Personas con riesgo de sufrir trombosis,
  4. Después de sufrir traumatismos severos.
  5. Personas alérgicas a materiales adhesivos.
  6. Embarazadas.
  7. Diabéticos.
  8. Personas con metástasis.

En algunas de estas situaciones sí se podría apostar por el kinesiotape con ciertas modificaciones, aunque debe ser el profesional el que decida si es recomendable o no utilizarlo.

Fuentes:

  1. https://fisiomarket.com/blog-de-fisioterapia/kinesiotape-que-es-y-como-funciona/
  2. https://www.saludmasdeporte.com/kinesiotape/
  3. https://www.ortoweb.com/blogortopedia/kinesio-tape-o-vendaje-neuromuscular/

Los glucocorticoides no son tan efectivos como la fisioterapia para el dolor de la artrosis

Una reciente investigación concluye que los pacientes que han recibido fisioterapia frente a las inyecciones de glucocorticoides han conseguido reducir el dolor y mejorar la funcionalidad física.

Según los hallazgos revelados por un reciente estudio, la fisioterapia aplicada a pacientes con artrosis de rodilla consigue una mayor reducción del dolor y de la discapacidad funcional que los tratamientos basados en inyecciones de glucorticoides intraarticulares.

Los glucocorticoides son hormonas pertenecientes a la familia de los corticosteroides que participan en la regulación del metabolismo de carbohidratos favoreciendo la gluconeogénesis y la glucogenólisis; poseen además actividad inmunosupresora.

El estudio, se encuentra liderado por Gail Deyle, miembro de la Army-Baylor University Doctoral Fellowship. Este ha contado con una muestra de 156 pacientes con una edad promedio de 56 años. Estos padecían artrosis en una o ambas rodillas y fueron sometidos de forma aleatoria en una proporción de 1: 1 para recibir un tratamiento basado en fisioterapia o una inyección de glucocorticoides. Cabe señalar que la severidad del dolor y el nivel de discapacidad eran similares en los pacientes de ambos grupos.

Los pacientes integrados en el grupo cuyo tratamiento se basaba en la fisioterapia recibieron instrucciones sobre los ejercicios, movimientos articulares y los criterios sobre los que se fundamentarían estos en términos de dosificación y progresión de la intensidad. A los sujetos se les administró una media de ocho sesiones de fisioterapia durante un periodo de entre cuatro y seis semanas. Estos contaban con la opción de acudir a entre una y tres sesiones adicionales en el momento de las reevaluaciones, fijadas cuatro y nueve meses después de la finalización del tratamiento.

Por otro lado, un reumatólogo fue el encargado de suministrar las inyecciones intraarticulares a los pacientes incluidos en el grupo de los glucocorticoides. Estos recibieron una inyección en una o ambas rodillas (en función de la presencia o no de artrosis) de 1 ml de acetónido de triamcinolona y 7 ml de lidocaína al 1%. Antes de tomar la decisión de administrar la referida combinación el grupo de investigadores debatió sobre si era necesaria la administración de inyecciones adicionales. Se determinó que los pacientes podían recibir una media de tres inyecciones anuales en un año.

El análisis de los resultados del estudio se ha efectuado tomando como referencia el Índice de Artrosis de las Universidades McMaster de Western Ontario (WOMAC, por sus siglas en inglés), que establece una puntuación que va de cero a 240, siendo los resultados más altos los que se atribuyen a pacientes con dolor severo, discapacidad funcional y rigidez elevada.

De acuerdo a esto las puntuaciones obtenidas por los dos grupos de pacientes al inicio del estudio fueron de 108.8 +/- 47,1 en aquellos a los que les fue administrada la inyección y de 107.1 +/- 42.4 en el grupo que recibió fisioterapia.

Tras un año de aplicación de ambos tratamientos, las puntuaciones medias fueron de 55.8 +/- 53.8 para el grupo al que se le administraron los glucocorticoides; y de 37 +/- 30.7 en los que recibieron un tratamiento basado en la fisioterapia.

De este modo los investigadores concluyeron que la fisioterapia como tratamiento en pacientes con artrosis de rodilla reporta una mejoraría en la puntuación relativa al dolor y funcionalidad física, frente a las inyecciones de glucocorticoides.

El estudio “Physical Therapy versus Glucocorticoid Injection for Osteoarthritis of the Knee”, fue publicado en New England Journal of Medicine

Fisioterapia respiratoria, importante en la actualidad

Fisioterapia respiratoria, concepto:

Es una especialidad de la fisioterapia que se encarga del tratamiento, prevención y estabilización de las diferentes enfermedades del aparato respiratorio o cualquiera que interfiera en su correcto funcionamiento, con el fin de mantener o mejorar la función respiratoria.

Objetivo:

Conseguir una mejoría de los síntomas y enlentecer la progresión de la enfermedad, consiguiendo la máxima capacidad física, mental, social y laboral de cada paciente.

Los procedimientos se basan en dos puntos:

  • La terapia física, que consistirá en fisioterapia respiratoria y ejercicios respiratorios.
  • El entrenamiento muscular, tanto general, como de los músculos respiratorios.

Indicaciones:

Enfermedades pulmonares obstructivas, restrictivas, crónicas y agudas. Agudas como bronquitis o neumonías y en enfermedades crónicas como EPOC, bronquiectasias, enfermos neuromusculares y neurológicos con afectación respiratoria, asma, cáncer, pre y post cirugía toraco-abdominal, trasplante pulmonar, encamamiento prolongado…

Precauciones:

La sesión nunca se debe realizar durante las dos horas posteriores a una comida para evitar vómitos o reflujo gastroesofágico.

Complicaciones:

  1. Desaturación por debajo de 85% (según pulsioxiometría).
  2. Broncoespasmo.
  3. Extubación accidental.
  4. Movilización de secreciones que ocluyen totalmente el TE (tapón de moco).
  5. Erosión de la mucosa bronquial.
  6. Reflejo vasovagal.

Contraindicaciones:

La fisioterapia respiratoria debe de ser realizada con cautela o incluso contraindicada en los siguientes casos:

  1. Pacientes con coagulopatias.
  2. Estado asmático.
  3. Estado epiléptico.
  4. Posoperado de cirugía craneo-encefálica.
  5. Sistema osteoarticular debilitado con riesgo de fracturas.
  6. Fractura de costillas.
  7. Aumento de la presión intracreaneal.

Técnicas y ejercicios:

Drenaje postural:

Es la técnica que mejor se tolera y la preferida para la eliminación de las secreciones. El objetivo de esta técnica es conseguir que las secreciones drenen por acción de la gravedad hacia bronquios mayores, traquea, hasta conseguir expulsarlas con la tos.

Para realizar este drenaje postural, es preciso colocar al paciente en la situación más adecuada, según la zona del pulmón que deseemos drenar.

Cada posición debe mantenerse durante 3-5 minutos. Antes de comenzar la técnica, es necesario que el paciente sepa toser y respirar de forma profunda y eficaz. No debe realizarse cuando el paciente está recién comido.

Percusión y vibración:

Se usan asociadas a la técnica de drenaje postural. La percusión consiste en dar palmadas, de una manera rítmica, con las manos huecas. El objetivo que persigue es desalojar mecánicamente las secreciones espesas adheridas a las paredes bronquiales.

La vibración consiste en la compresión intermitente de la pared torácica durante la espiración, intentando aumentar la velocidad del aire espirado para, de esta manera, desprender las secreciones.

Educación de la tos:

Esta técnica consiste en enseñar a toser, después de una inspiración profunda, durante la espiración, procurando hacerla en dos o tres tiempos para un mejor arrastre de las secreciones.

Está indicada en el pre y postoperatorios de pacientes con excesivas secreciones, así como en las situaciones de producción excesiva de esputo.

Ejercicios respiratorios:

Los ejercicios respiratorios tienen como objetivo disminuir el trabajo respiratorio, mejorar la oxigenación y aumentar la función respiratoria. Se realizarán una vez al día. Entre ellos tenemos:

  1. Respiración con labios fruncidos.
  2. Respiración diafragmática.
  3. Ejercicios de expansión pulmonar.
  4. Ejercicios para toser de forma eficaz y controlada.
  5. Ejercicio con respiración incentivada.

Bibliografía:

  • https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/cuidados-casa/como-realizar-fisioterapia-respiratoria
  • https://www.fisiorespiracion.es/que-es-fisioterapia-respiratoria.htm
  • https://www.efisioterapia.net/articulos/fisioterapia-respiratoria-0
  • https://fisiobronquial.com/que-es-fisioterapia-respiratoria/